Atrapado en el tiempo
Es difícil encontrar en la última década del siglo pasado (no hablemos ya de lo que llevamos del nuevo) una película que entronque de manera tan directa con la comedia clásica de la época dorada de Hollywood como Groundhog Day. Recogiendo la imagen del título de su versión española, se diría que el cuarto largometraje de Harold Ramis (director con apenas una docena de títulos en su filmografía, ninguno de los restantes a la altura del que nos ocupa) es una obra felizmente atrapada en el tiempo, concretamente en el de los grandes títulos del screwball que dieron al género de la comedia su mejor y más fructífera etapa.
Director:
Harold Ramis